domingo, 14 de junio de 2009

NEOLIBERALISMO, AUTORITARISMO Y EXCLUSION NATIVA

Por: Percy J. Paredes Villarreal

El último fin de semana, en la zona de Bagua, en el Departamento de Amazonas, conocida como una zona selvática, donde se concentran muchas etnias de nuestro país; se ha desatado una matanza, que hasta la fecha no se tiene un número exacto de las perdidas y/o victimas de este enfrentamiento entre fuerzas del Orden (Policía Nacional del Perú) y los nativos de las diferentes etnias existentes en este lugar.

Y esto se debe a que, hasta la fecha, el gobierno central no deroga el Decreto Legislativo Nº 1090; que permite expropiar los recursos naturales existentes en esta zona, cuyos dueños de estos espacios territoriales, son los indígenas que por muchos siglos han vivido en estos lugares. Pero ahora, con el Decreto Legislativo Nº 1090 se busca expropiar todos estos recursos naturales para venderlos al mejor postor que vienen a ser las transnacionales; y de esa manera, dar carta libre al Tratado de Libre Comercio (TLC).
Este Decreto Legislativo, que atenta contra el Medio Ambiente y las etnias de nuestra zona selvática; desde las organizaciones nativas, piden su anulación, debido a una serie de deficiencias legales como es el Convenio Nº 169 de la OIT, donde se indica que todo tipo de inversión o privatización en las zonas amazónicas y que atentan contra estas comunidades nativas, tienen que ser consultadas. Pero, el gobierno central hace caso omiso a esta norma a pesar que el Estado ha suscrito este Acuerdo Internacional, pero que, ahora desacata y hace caso omiso a los acuerdos internacionales.
Dentro de este hecho cuestionado por todos los sectores sociales, económico, políticos; se demuestra un compromiso del gobierno central, sustentado en la continuidad del Neoliberalismo, una actitud autoritaria y un rechazo a nuestra diversidad cultural. Esto se puede interpretar o entender en el articulo denominado “El síndrome del Perro del Hortelano”, publicado el 28 de Noviembre del 2007, en el Diario El Comercio.
En ese articulo, escrito por el flamante Presidente de la República Peruana, Dr. Alan García Pérez, diseña la estrategia a seguir durante, su segundo periodo de gobierno; contrariamente a su primer gobierno de corte populista, y ahora en su segundo periodo de gobierno, tiene una orientación meramente neoliberal y ultra derechista. Reflejando en ese artículo, una posición de profundizar las reformas estructurales que faltan; concentrándose en la privatización y entrega de los principales recursos naturales existentes en las zonas alejadas de las urbes, para regalárselos a las empresas transnacionales.
Dentro de su lógica del gobernante, no toma en cuenta a la burguesía nacional, que en estos últimos tiempos se encuentra en proceso de extinción, convirtiéndose en testaferros o aliados de las transnacionales. Por el contrario, para García Pérez, la privatización debe permitir el ingreso de mayor cantidad de empresas extranjeras.
NEOLIBERALISMO VS DEMOCRACIA:
Milton Freidman, en su libro “La Libertad de Elegir”, que se ha convertido en la Biblia de los Neoliberales; y Samuel Huntington, en el articulo publicado en una revista Mexicana “Facetas”, con el título “El precio de la Libertad”; nos ilustran con algunas frases importantes e interesantes, orientando y explicando con claridad, que la implementación de las reformas estructurales de carácter neoliberal, sustentados en el “Consenso de Washington”, deben contar con gobiernos fuertes y autoritarios. Ya que, la respuesta por parte de los afectados a estas medidas iba a ser rechazado, con acciones de protesta radicales; motivo por el cual se necesitaba de mano dura para su implementación.
Estas reformas estructurales de carácter neoliberal, que se han implementado en diversos países de América Latina; ha traído muchas consecuencias desastrosas, generando incremento de la pobreza, pasando a una extrema pobreza, generando: desnutrición, analfabetismo, desocupación, desempleo, exclusión social, corrupción, violación a los derechos humanos, sociales, económicos y culturales, etc.
Con estas consecuencias queda demostrado, que los gobiernos que han implementado este modelo, han tenido que mantener mano dura contra la población, impidiendo su fracaso; allí, esta el mejor ejemplo, el gobierno de Pinochet en Chile, Sánchez de Lozada en Bolivia, Menen en Argentina, Fujimori en el Perú, entre otros gobernantes de América Latina.
En nuestro País, durante el Primer Gobierno del Apra, conducido por el actual gobernante, trajo como consecuencia el colapso de la economía, la corrupción, el incremento del terrorismo, etc.; creando condiciones para que el nuevo gobernante, implementara el modelo neoliberal, sin tener oposición, acabando y destruyendo los beneficios sociales de los trabajadores. A pesar de ello, Fujimori, tuvo que dar un autogolpe de Estado para poder implementar las reformas estructurales vinculadas al “Consenso de Washington”, y de esa manera acabar con la democracia representativa, generando un régimen autocrático y por ende centralista y verticalista; teniendo como aliado a los militares y a la gran burguesía.
Dentro de ese contexto, se comienzan a implementar las políticas neoliberales y por ende, fortalecer el régimen de fujimontecinista, que a la larga demuestra ser corrupto y violador de los Derechos Humanos.
La implementación de las políticas neoliberales, no bastaron una década, por el contrario, se tenía que continuar profundizándolo; pero, la corrupción comenzó a carcomer al Estado, y a la vez la caída del régimen fujimorista, como si fuese un castillo de naipe. De esa manera, quedó demostrado que Fujimori tuvo como aliado a Montesino, y ambos fueron los que dirigieron desde el Pentagonito, los destinos del País; ambos, en la actualidad están pagando todas sus culpas.
La década de los 90, del siglo pasado, fue una etapa que avergüenza al País; pero a la vez, significó el fortalecimiento de la conciencia peruana, de luchar contra la corrupción, y las políticas neoliberales, que no trajeron cambio ni tampoco desarrollo, por el contrario, significó mayor pobreza, desempleo, migración internacional, desnutrición, etc. Motivo por el cual, se comenzaron a constituir Mesas de diálogos, que dieron paso al Acuerdo Nacional, a la conformación de la Mesa de Concertación de la Lucha Contra la Pobreza, a la Participación Ciudadana, a la Fiscalización, etc. Pero, también significó la conformación y fortalecimiento de organizaciones sociales, que en todo momento estaban excluido dentro de un Proyecto de Desarrollo Nacional.
Por lo que, el inicio de la Transición Democrática, que fue con Alejandro Toledo, implico una actitud más atinada y de flexibilidad, que permitió buscar consensos y aglutinar políticas, que permitieran unir esfuerzos; pero, en el fondo, las políticas neoliberales, no se profundizaron como lo fue, con Fujimori. Esta sensatez en Toledo, significó cierto avance, aunque con algunas modificaciones, al cual se le denomino el “Neoliberalismo con rostro Humano”.
El paso del toledismo al segundo gobierno del Aprismo; que en un principio, levanto las banderas de las reivindicaciones sociales, de justicia social, y otras consignas en favor de los más necesitados, se convirtieron en demagogia. Solamente los utilizó como propaganda electoral, para de esa manera atraer el voto de los ingenuos, que creyeron en un reconocimiento de mea culpa y un cambio en su actitud; pero, se equivocaron, porque dio un giró de 360º, al asumir una posición más de ultra derecha. Tal como el lo ha manifestado en varías oportunidades, que el puede seguir siendo la alternativa de la derecha neoliberal.
Nuevamente, el segundo gobierno de Alan García, asumió una posición contraria a lo que el Aprismo, siempre ha pregonado como la justicia social, pero que ahora, el régimen se ha relacionado con la corrupción, la mediocridad, y el autoritarismo; los hechos reflejan que este gobierno es continuación del fujimorismo sin Fujimori; enarbolando y defendiendo el neoliberalismo como la alternativa a la crisis y al empobrecimiento que vive muchas personas en nuestro país. Pero los resultados demuestran todo lo contrario.
GOBERNANTE AUTORITARIO:
En estos últimos meses, desde el gobierno central, se han venido dando una serie acciones reflejando incompetencias para poder solucionar los problemas existentes dentro del Estado como en la sociedad peruana; allí, se encuentran los hechos ocurridos, como: los Petroaudios, los levantamientos en las regiones, el caso del VRAE, la crisis financiera, Panamericana Televisión, y últimamente la masacre en Bagua; demostrando, que el gobierno no sabe negociar, ni tampoco es capaz de generar espacios de diálogos y de consensos. Todo lo contrario, ha endurecido su política, tiene una actitud vertical y autoritaria; desde el gobierno central, toma el lema de: “Tenemos que defender la democracia, por lo tanto hay que reprimir a todos aquellos que se oponen a las medidas del gobierno”.
Los supuestos logros obtenidos en algunos aspectos, en estos últimos meses; han sido opacados por estos tipos de acciones, que en cierta forma refleja un gobierno sin un rumbo ni una ruta hacia donde ir. Adolece de estrategias, que permitan ganar aliados o buscar consenso.
Y esto tiene que ver, con la falta de tolerancia, de respeto a los que no piensan igual que ellos; por eso, actúa meciendo a las organizaciones sociales, para entretenerlos, Por un lado; por el otro lado, busca imponer decretos y leyes, a como de lugar; para satisfacer a los tiburones de las transnacionales. Todo ello a nombre de la democracia, sin importarle vidas humanas, personas con culturas diferentes, sectores sociales que se encuentran empobrecidas, etc.
Es importante tratar de estudiar psicológicamente al gobernante, si en verdad es una persona que cuenta con principios democráticos, o sencillamente es una persona que tiene actitudes autoritarias y verticalistas, que busca en todo momento someter y reprimir, a todos aquellos que no están o no coinciden con el.
La Matanza en los Penales, en el año de 1986, y la guerra sucia que se implementó durante el primer gobierno del Dr. Alan García Pérez, reflejaba en aquel entonces, una posición autoritaria por parte del primer régimen aprista; pero se buscaba justificar a través de que el país vivía una etapa de terrorismo; por lo que, la defensa de los derechos humanos, en aquel entonces no formaba parte de la agenda del gobierno. En la actualidad, dentro de un marco de democracia, ¿Se podrá Justificar la masacre en Bagua?, y en el cual, tanto el Presidente, como sus Ministros que son responsables de este accionar violento, ni siquiera han reconocido su error, mucho menos han dado un paso al costado. Todo lo contrario, solamente, actúan unilateralmente, reconociendo a los Policías caídos, y cuestionando a los indígenas, considerándolos como violentistas, etc., sin entender su cultura y su cosmovisión; ya que, los nativos son seres humanos igual que todos, que luchan por mantener y defender lo que es suyo; ya que, son etnias con una identidad ancestral que valora y ama su tierra.
El sarcasmo y la ironía, de este gobierno, culpándolos y asignándoles como el síndrome del perro del hortelano, a todos aquellos que se oponen a su proyecto dogmatico, similar a como actuaba Sendero. Por lo que, todos los que están en desacuerdo con Alan García son sus enemigos, no quieren el desarrollo ni la modernización del país; tildándolos, como atrasados y hay que extinguirlos, el gran ejemplo de esta concepción errónea y neoliberal, es lo que ha sucedido en Bagua.
INDIGENAS AMAZONICOS: CIUDADANOS DE CUARTA CATEGORIA

Nuestro país, es una suma de naciones y culturas, que permiten reflejar la diversidad cultural; motivo por el cual, en su gran mayoría, las políticas públicas que se dan o se implementan a nivel nacional, en muchas de las veces, se dan desde la capital del país y no reflejan la realidad; por el contrario, estas políticas públicas buscan beneficiar a entidades privadas y/o transnacionales, dejando de lado el desarrollo endógeno de los diversos pueblos, existentes en nuestro país, que somos una nación multicultural. Por lo que, se quiere generalizar o tratar por iguales a todos los peruanos, sin tomar en cuenta la diversidad existente.
Asimismo, la diversidad cultural, nos permite hacer entender que somos un país de todas las razas o como dijera José María Arguedas “De Todas las Sangres”; pero, esta realidad cultural, no es entendido o asimilado por las autoridades o lideres nacionales, que bajo un modelo de desarrollo neoliberal, se busca privatizar todo lo que, en este sector amazónico existe, acabando con el último pulmón del mundo.
Tanto el Estado, como la República, y los diversos gobiernos de turnos, siempre han ignorado y han maltratado, a los nativos de nuestro país; viéndolos como personas que no tienen voz ni voto, no cuentan con derechos, excluyéndolo de todo tipo de proyecto político de desarrollo nacional.
Los indígenas y las etnias existentes en esta zona amazónica, son vistos por los defensores de este Estado excluyente, como ciudadanos de cuarta categoría, que son incivilizados, nativos, que deben ser educados e incorporados a este mundo moderno y occidentalizado, a través de la represión; por lo que, deben aceptar todo lo que este Estado Neoliberal les impone, sin tener que defender lo que es suyo.
Este es una visión, cuyo principal defensor es Vargas Llosa, y en su obra “La Utopía Arcaica”, lo describe, como un sector atrasado; y que, actualmente, lo recoge García Pérez,escribiendolo en sus famosos artículos publicados en el Diario El Comercio, cuyos propietarios son los blancos de la capital, que quieren colonizar este supuesto territorio inhóspito.
Del mismo modo, podemos decir que estas etnias, también se consideran ciudadanos ajenos a un Estado Unitario, que no los valora, ni tampoco los incluye social, política y económicamente; motivo por el cual, para ellos, todo lo que sucede fuera de su cosmovisión le es ajeno, sin importarle.
Interculturalidad o Integración, valoración de la identidad cultural de ellos; nunca ha sido política del Estado, mucho menos ha estado dentro de los Planes de gobierno de los diversos candidatos o gobernantes del País.
La lucha permanente contra estas etnias, por querer arrebatarle, lo que ellos han podido cultivar y mantenerlo, como elemento importante para la vida y la salud; hoy se busca, quitarles. Por lo que, para el régimen neoliberal y autoritario, solamente queda actuar violentamente, buscando su extinción como etnia, y queriendo quitarle lo que es suyo; todo eso, a nombre de la modernización y el desarrollo; tal como lo que se hizo en otros países, como lo fue Los Estados Unidos, donde se busco exterminar a las culturas primigenias, para poder modernizarse.
Es común ver, que cuando algunos colonos, extraños o ajenos a su etnia, y tocan lo que es suyo; los nativos, actúan organizadamente, para repeler o evitar que se les quite lo que, para ellos es su razón de vivir. Los nativos mantienen una estructura organizativa ancestral, una economía de subsistencia, valores y costumbres, que lo han venido cultivando a través de un proceso de endoculturación; se sostienen a través de las redes sociales y de parentesco, son sociedades muy tradicionales, sus armas son muy ancestrales. Por lo que, consideran que su desarrollo debe ser endógeno, sin ser contaminado culturalmente, ni tampoco avanzar en un proceso de modernización occidental.
Estas etnias, no creen en el mercado, ni tampoco en la propiedad privada; mucho menos, saben lo que es el neoliberalismo; saben adecuarse a las circunstancias, pero también ubicarse dentro de un mundo y una cultura que es ajena, sin renunciar a su identidad.
Estas características culturales no son visto, ni entendido por los gobernantes, que buscan imponer un orden y un modelo, que para ellos no le es interesante; porque, su cosmovisión y su ideología, esta centrado en su identidad cultural. Por lo que, el gobierno nunca va a poder entender a la cultura nativa; por el contrario, va a tener que seguir exterminándolo para que se pueda apoderar de sus recursos naturales; y ya comenzó este proceso.
Los nativos, son amplios al dialogo, son muy respetuosos; pero también son defensores de su cultura; y lo que, están queriendo hacer el gobierno central es destruir su cosmovisión, su identidad. Por lo que, ellos nunca lo van a permitir. Para ellos, lo que se ha declarado es una guerra, tal como lo dijera y parafraseando, a Samuel Huntington, el “Choque de Civilizaciones”; el enfrentamiento entre los que quieren acabar con su cultura y someterlos al mercado, y los que aman la libertad, el medio ambiente y su identidad.
CONCLUSIÓN:
Este es el gran dilema que en estas semanas, se viene viviendo en nuestro país. Por lo que, podemos decir que por un lado están los que siguen aferrados al neoliberalismo, como modelo fracasado, pero que ahora se encarniza en el “Perro del Hortelano”, haciendo uso de la represión, para poder avanzar en el proceso de modernización occidental, sustentado en una económica de mercado, privatización y restricción del Estado; frente a una sociedad nativa, con una diversidad cultural, excluido política, económica y socialmente, con un modelo de organización ancestral y tradicional; que se unen para defender lo que es suyo.
Uno que tiene el poder y control del Estado Unitario, que siempre ha excluido socialmente a este sector; y otro, que no tiene poder más que la defensa de su cultura y su espacio territorial, que lo han seguido defendiendo a través de la historia, y lo defenderán así tengan que morir por ella. Hacia donde nos va a llevar este descenlace.