CASA GRANDE Y SUS MODELOS DE DESARROLLO ECONOMICO TERRITORIAL Y/O LOCAL
Por: Percy José Paredes Villarreal
Dentro
del marco de la era de la globalización, se pensaba que los espacios locales
iban a desaparecer para dar paso a los espacios macro o internacionales; pero,
la realidad ha demostrado que dentro de este contexto, los territorios pequeños
están comenzando a fortalecerse y a tomar sentido dentro del proceso de
desarrollo. Del mismo modo, los modelos de desarrollo verticalistas,
impositivos e importados, están comenzando a ser reemplazados por los modelos cuyas
metodologías se hacen de abajo hacia arriba, es decir de lo local hacia lo
nacional.
Del
mismo modo, en estos últimos tiempos, los actores locales existentes y habidos
en un determinado territorio están comenzando a interesarse por construir su propio modelo de desarrollo;
para lo cual, aprovechan las potencialidades, fortalezas y oportunidades con
que cuenta; de esa manera, en forma
organizada y planificada comienzan a trabajar el desarrollo local de acuerdo a
su realidad concreta.
Debemos partir por entender la importancia del
Desarrollo en los espacios territoriales, para lo cual existen diferentes
teorías que buscan explicar dicho concepto. Una de esas es la teoría
evolucionista quien considera que “la
significación del término desarrollo está estrechamente ligada a la noción de
evolución. Un organismo vivo se desarrolla, crece durante el proceso evolutivo
que va del nacimiento a la muerte. En este sentido se han estudiado en el
hombre las diferentes fases del desarrollo desde el punto de vista psicológico,
biológico, relacional, etc. El concepto de desarrollo aparece entonces
indisolublemente ligado al de proceso evolutivo compuesto de etapas que es
necesario recorrer para llegar al final.
La economía y
la sociología del desarrollo adoptaron naturalmente este enfoque. El proceso de
transformación fundamental que fue la industrialización, que desembocó en la
constitución de sociedades llamadas desarrolladas, fue concebido como un único
y vasto movimiento planetario de evolución hacia una forma social más
“avanzada”. Las sociedades industrializadas constituyeron el modelo para la
sociología y la economía evolucionista, de la misma manera que el hombre lo fue
para el análisis de la evolución de las especies y el adulto para la psicología
evolutiva. En todas estas áreas, el evolucionismo construyó un modelo a partir
del conocimiento del ‘punto de llegada’ de la evolución.” (Arocena: 2002:69)
Asimismo, es importante entender que este proceso tiene
una relación con la historia, por la que ha venido atravesando un determinado
territorio. Para lo cual, existen diferentes enfoques históricos del
desarrollo; por lo tanto consideramos que en este aspecto “…la concepción historicista subraya el carácter único y enteramente
nuevo de cada proceso de desarrollo. Lo esencial no es el punto de llegada transformado
en un modelo sino el punto de partida irreductiblemente diverso. El
enfoque historicista pondrá entonces de relieve los perfiles nacionales y
regionales específicos. El éxito de un proceso de desarrollo dependerá de la
capacidad de sus actores para tomar en consideración la especificidad de cada
nación, país o microrregión. La historia se vuelve por lo tanto un punto de
referencia fundamental. No hay posibilidades reales de desarrollo si no se
toman en cuenta los factores de determinación que vienen del pasado. Es en los
trazos del pasado donde el actor debe buscar sus proposiciones de futuro”. (Arocena,
2002: 74)
Dentro de este enfoque evolutivo e historicista, consideramos la existencia de “…tres ideas fundamentales alimentan esta reflexión sobre el desarrollo:
1.
El estudio de la historia de las sociedades
industriales más antiguas permite modelizar las etapas que ellas han recorrido
hasta la industrialización.
2.
Esas etapas tienen un valor universal; ellas estructuraran
tarde o temprano el acceso de las sociedades a la industrialización.
3.
El modelo industrial supone la superación, sino la
destrucción de la sociedad llamada tradicional.(Arocena, 2002: 70)
Es importante entender que el historicismo del
desarrollo considera que el proceso de desarrollo ha tenido que ver mucho con
la toma de decisiones políticas antes que
un proceso natural. Esto ha permitido
a nivel macro o nacional, en muchos de los casos, las decisiones
políticas sean tomadas desde el Estado Nacional repercutiendo en los espacios
subnacionales o locales, que han tenido que ir adaptándose o adecuándose a esos
tipos de cambios; por lo tanto, “Para el historicismo, cada proceso de
desarrollo está marcado por una historia específica construida sobre las
opciones políticas que orientaron el devenir social. La palabra clave no es el progreso
sino la estrategia. La lógica del desarrollo no está más dirigida por
una ley socioeconómica “natural”, sino por una opción política contingente
adaptada a cada realidad específica” (Arocena, 2002: 74-75)
Desde esta perspectiva y tomando en cuenta algunos
enfoques sobre desarrollo, consideramos
de suma importancia entender el o los modelos de desarrollo por la que ha vivido
un determinado territorio. Para lo cual, consideramos o “Se entiende por modelo de desarrollo las diferentes formas que fue
tomando la estructura socioeconómica local a lo largo de las últimas décadas en
el territorio estudiado. Es fundamental en este nivel del análisis reconstruir
ese proceso intentando precisar las lógicas que fueron pautando sus grandes
transformaciones…” (Arocena, 2002: 203)
Por lo tanto, debemos entender que existen enfoques
del desarrollo a nivel macro, como también a nivel micro. Es decir enfoques o
modelos de desarrollo nacional, como también dentro del ámbito local; asimismo,
existen dimensiones del desarrollo como es: desarrollo económico, desarrollo
social, desarrollo ambiental, etc. Por ello, es importante entender que el
desarrollo tiene que relacionarse con el
rumbo y el derrotero, que los diversos actores locales consideran que debe
enrumbarse la sociedad local.
En la actualidad, se busca articular la propuesta de
desarrollo a nivel macro con lo micro; esto se refleja en los Objetivos del
Desarrollo del Milenio (ODM), que fue aprobado y firmado por todos los Jefes de
Estados en el año 2000, y que en nuestro país, se ha adecuado al Acuerdo
Nacional, firmado por todos los actores nacionales en el año 2001, después de
la renuncia y fuga de Fujimori del país; para luego, ser sistematizado en el
Plan Bicentenario. Esta a su vez, tiene que ser adecuado a los Planes de
Desarrollo Regional, Provincial y Distritales, respectivamente. Todos estos
instrumentos de desarrollo tienen que ser instrumentalizados dentro del marco
de la Planificación.
3. Entendiendo el Desarrollo Local:
El tema de Desarrollo
Local es muy amplio y existen diversas definiciones y conceptos, pero para esta
oportunidad queremos partir por definir el origen, tomando en cuenta lo que nos
dice José Arocena, Sociólogo Uruguayo, quien plantea que “El desarrollo local se produce cuando existe capacidad de negociación
y de juego entre actores, buscando una articulación de intereses que desemboque
en beneficios para la sociedad local. El municipio tiene un papel capital en la
constitución de ámbitos que permitan esa articulación. Puede crear espacios de
coordinación con las oficinas y agencias locales de los organismos nacionales,
y puede también mejorar con las empresas privadas, regulando su actuación en
función del interés de la comunidad” (2002: 123)
Asimismo, es importante considerar de sumo interés el
desarrollo local como “proceso concertado
de construcción de capacidades y derechos ciudadanos en ámbitos territoriales y
político-administrativos del nivel local (municipio=territorios) que deben
constituirse en unidades de planificación, de diseño de estrategias y proyectos
de desarrollo con base a los recursos, necesidades e iniciativas locales. Este
proceso incorpora las dinámicas del desarrollo sectorial, funcional y
territorial, que se emprenden desde el Estado, las organizaciones sociales y la
empresa privada en el territorio” (Demuca, 2009:3)
Del mismo modo, existe otra definición como, los que
consideran “El desarrollo local es
integral, es decir, incorpora en el diseño de sus planes al conjunto de
dimensiones presentes en el territorio. Social, económico, ambiental, etc. Por
ello, iniciar un proceso de desarrollo local debe permitir favorecer el
crecimiento económico, la democracia política y el progreso social de modo que
se vaya alcanzando el desarrollo humano sostenible” (Rojas, 2005).
Dentro de esta perspectiva podemos decir que el
Desarrollo local puede ser endógeno o exógeno. De preferencia se trabaja bajo
la modalidad del Desarrollo endógeno, en la medida en que mientras se aprovecha
el capital humano, las potencialidades y los recursos existentes dentro del
territorio, se podrá impulsar el desarrollo; por lo tanto, es importante que
los actores locales consideren o apuesten por lo existente en la localidad; de
esa manera, estaremos hablando del desarrollo local endógeno. Pero, si es lo
contrario, es decir se trae capital, tecnología y recurso humano de fuera,
sencillamente estaremos hablando de un desarrollo local exógeno.
Y por último es importante entender que dentro del
desarrollo local, se pueden distinguir dos ejes que vienen a ser el desarrollo
social y el desarrollo económico. Para lo cual, debe existir una relación entre
ambas partes. “… los proceso de
desarrollo local, que no son simplemente procesos de crecimiento económico,
plantean siempre la articulación de la eficiencia productiva con la equidad
social.
Los procesos
de desarrollo local obligan a situarse en una perspectiva integral porque la
atención se dirige a la construcción social cotidiana al hombre concreto y su
entorno inmediato, a su permanente transformación de la naturaleza. Importa
cada proceso en su perfil específico, de su forma particular de crear y de
destruir, en su manera de hacer fructífera un territorio cargado de historia,
en sus mecanismos de convivencia y de organización”. (Arocena, 2002:
164-165-166)
4. Desarrollo Económico Local:
Debemos partir por
entender que un elemento fundamental e importante para poder generar desarrollo
económico local, tiene que ver con el aspecto competitivo del territorio; por
lo que debemos definir “La Competitividad territorial, es la
capacidad efectiva de un territorio (localidad, región) para incrementar su
producción de manera sostenida en base a la inversión empresarial y en la
elevación social de la productividad, como las bases de la generación de
riqueza y de bienestar con equidad. La productividad de un territorio es la
relación existente entre las salidas (los productos) y las entradas (los
insumos), en y para, producir bienes y servicios. Es la capacidad de un
territorio de generar valor agregado.
Se puede también conceptualizar a la competitividad
territorial como la capacidad de un territorio para desarrollarse de manera
sostenida en un contexto de competencia
globalizada. La competitividad del
territorio permite mejorar el posicionamiento de la localidad en el sistema de
ciudades, mediante procesos de mejoramiento del entorno local e innovación
tecnológica (valor agregado-ventajas) en las actividades productivas
(producto-proceso-gestión empresarial) y en la institucionalidad local.” (Demuca,
2009:9)
Asimismo, es importante
considerar al Desarrollo Económico Local (DEL), como un “… proceso reactivador de la economía y dinamizador de la sociedad
local, que mediante el aprovechamiento eficiente de los recursos endógenos
(internos) existentes en una determinada zona, es capaz de estimular su
crecimiento económico, crear empleo y mejorar la calidad de vida de la
comunidad” (Alburquerque, 1996). Más tarde el mismo autor, plantea que el DEL
‘no se sustenta en el desarrollo concentrador
y jerarquizado, basado en la gran empresa industrial y la localización
en grandes ciudades, sino que buscan un impulso de los recursos potenciales de
carácter endógeno tratando de construir un ‘entorno’ institucional, político y
cultural de fomento de las actividades productivas y de generación de empleo en
los diferentes ámbitos territoriales” (Alburquerque, 2004)”. (Demuca, 2009: 3)
Del mismo modo, “…El DEL es un proceso que promueve el
gobierno local en alianza con otros agentes, con el propósito de ampliar la base económica
local, acumulando y capitalizando sus excedentes, fortaleciendo el tejido económico
y generando el desarrollo de un entorno competitivo, que posibilite el
desarrollo de las empresas, la generación de empleo local y luchas de manera
efectiva contra la pobreza. Este proceso exige el diseño y la implementación de
una estrategia de desarrollo continuo, utilizando los recursos locales y el
desarrollo de innovaciones en un contexto de competencia y globalizada. Al
mismo tiempo, busca formas de conectar las políticas de desarrollo local,
regional y nacional en un solo marco de actuación integrador” (Demuca, 2009:
3).
Cuando hablamos de DEL,
nos estamos refiriendo a un sector importante dentro del territorio y como
elemento fundamental para el Desarrollo; motivo por el cual, dentro de este
aspecto encontramos a diversos actores que se encuentran interrelacionado y que
tienen un solo interés que es el crecimiento y desarrollo. Por lo que, debemos
considerar que “En cada localidad
existente diferentes actores que conforman lo que se conoce como el sistema
económico local, estos son: Gobierno Local, empresas de bienes y servicios
(industria, comercio, etc.) organizaciones de servicios de soporte técnico y
formativo (organizaciones no gubernamentales, universidades, tecnológicos),
instituciones de soporte financiero, instituciones públicas, grupos asociados,
etc. La actuación coordinada de estos y su relación con otros de nivel regional
y nacional, hace posible el desarrollo de una serie de condiciones necesarias
para el desarrollo de la economía local, en el marco de un enfoque sistemático
e integral del desarrollo.” (Demuca, 2009: 3)
Dentro del DEL, podemos
hablar de dimensiones económicas productivas, lo cual debe contar con las
diferentes características que se deben encontrar al interior de un espacio
territorial, estas tienen que considerar:
-
“Economía
Local: dinámica y acumulación. La iniciativa económica permite poner en valor los recursos locales,
constituyendo nuevas unidades productivas articuladas con el conjunto de la
sociedad local. Se genera así una nueva dinámica económica, según un modelo de
acumulación descentralizado.
-
Un tejido
empresarial local. La creación o el fortalecimiento de un tejido
empresarial local caracteriza todo proceso de desarrollo local. El actor
empresarial (urbano o rural) es un protagonista de estos procesos. Pero la
condición básica para que estos actores influyan en el conjunto del sistema es
su capacidad para actuar más allá de las fronteras de sus empresas, es decir,
para interactuar con el resto de los actores locales.
-
Tecnología,
inversión y desarrollo. La incorporación de tecnología apropiada es una
condición de los procesos de desarrollo local. Aplicar tecnologías en el
sentido más amplio del término supone la adaptación a una realidad local de un
determinado conocimiento necesario para el desarrollo. En los niveles locales
se deben realizar las inversiones necesarias, siempre que la tecnología elegida
se adopte a las características específicas de la zona en cuestión.
-
Servicios
a particulares y a las empresas. Cuando el excedente económico del
proceso de desarrollo se vuelca a la sociedad local, aumenta el número y la
calidad de los servicios que se prestan a la población. Pero lo que es aún más
importante: un proceso de desarrollo local debe generar un aumento
significativo de los servicios a las empresas.
-
Integración
rural-urbana. Un proceso de desarrollo local
equilibrado supone una buena integración rural-urbana. La dualización es un
signo de debilidad del sistema local” (Arocena, 2002:225)
También es importante que la Municipalidad deba ser o
convertirse en el ente articulador, promotor y concertador del Desarrollo
Económico Local. “Por un lado, el
gobierno local deberá negociar la instalación de tal manera que pueda guardar
un cierto control sobre el desarrollo de la experiencia. Los gobiernos locales
no deben renunciar a su capacidad de negociación con los empresarios,
intentando que las implantaciones industriales se realicen de la manera más
integrada posible al entorno natural y social de la región. En segundo lugar,
se deberá evitar una situación de dependencia, gracias a la diversificación del
tejido de iniciativas. Los territorios son caracterizados por un tipo de
desarrollo mono industrial o mono productivo
de gran fragilidad; la crisis del rubro correspondiente trae siempre
aparejada una situación de catástrofe muy difícilmente superable. La
diversificación industrial y productiva genera procesos de desarrollo menos
dependiente y con mayores defensas frente a eventuales periodos críticos. Particularmente
las necesidades locales, que por definición tienen dimensiones
limitadas, deberán construir su fuerza sobre la base de la diversificación”
(Arocena, 2002: 132-133).
5.
Rol de la Municipalidad en el proceso de construcción
del Desarrollo Local:
Uno de los principales protagonistas y conductores en
la construcción de un modelo de desarrollo local es el municipio, quien es el
encargado de liderar este proceso, tal como se describe a continuación: “… la municipalidad es el órgano de gobierno
local que ejerce sus funciones y competencias en la localidad, y que en
general, en casi todos los países de América Latina, tiene las siguientes
finalidades con más o menos el mismo fraseo: 1) Representa a los vecinos; 2)
Provee servicios públicos; y 3) Promueve El desarrollo integral de la
localidad”(Demuca, 2009: 15)
Del mismo modo, tal como lo precisa Demuca, “las municipalidades tienen la legitimidad
para cumplir este rol, entre otras razones porque:
-
Representan democráticamente a la población y su
gestión político-administrativa se da por medio de cargos de elección popular.
-
Poseen un conocimiento profundo de las realidades
locales.
-
Están estrechamente involucradas en las actividades
productivas locales como proveedores de bienes y servicios públicos, infraestructura,
recaudadoras de impuestos y el control y planificación del territorio.
-
Les corresponde mantener el vínculo entre el gobierno
central, la sociedad civil y el municipio, siendo en consecuencia el canal por
excelencia para potenciar la coordinación interinstitucional y canalización
eficiente de los recursos públicos y privados hacia una visión común del
desarrollo.
-
Tienen el compromiso sobre la reducción de la pobreza
y un desarrollo sostenible plural, tomando en cuenta los grupos sociales más
vulnerables y normalmente menos representados”(2009:15)
Debemos considerar que las municipalidades, como
gobierno local, tienen que asumir el compromiso de convocar, dialogar y
concertar con los diferentes actores locales vinculados a las instituciones
públicas y privadas, a las organizaciones de los sectores económicos,
deportivos, sociales, culturales, educativos, medios ambientales, etc.; para
que en forma conjunta diseñen el tipo de desarrollo que se desea y se debe
construir; de esa manera, estas se pueden organizar en mesas de diálogos, de
trabajo y/o de concertación para trabajar la elaboración de un Plan de
Desarrollo Territorial o Local del Distrito; y en un evento con la
participación de todos los actores, validan y aprueban dicho Plan de
Desarrollo. Esto se debe a que “Las
municipalidades como expresión del Estado en el territorio son instituciones
democráticas, más cercanas a la ciudadanía y a sus intereses cotidianos las
cuales están llamadas a desempeñar funciones de impulso y gestión del desarrollo
cada vez más relevantes. Por ello, de las capacidades de gestión y liderazgo
que construyan las municipalidades depende en gran medida la ejecución del Plan
de Desarrollo… y sus posibilidades de sostenibilidad, ya que provee la
estructura técnica y política necesaria para garantizar el éxito del proceso”
(Demuca, 2009:15)
Esto va a permitir que la función de la municipalidad debe ir más
allá de la concepción tradicional existente en un espacio territorial, como la
de tan solo dedicarse a brindar servicios. Tal como lo enfoca Arocena, donde
considera que “Hoy los municipios están
viviendo un proceso de cambio que muestra nuevas funciones y nuevos soles. En
la concepción tradicional del actor municipal se incluía únicamente funciones
ligados a los servicios urbanos clásicos: pavimento, cominería, limpieza,
transito, alumbrado público, higiene de los alimentos, control de la
edificación, aspectos públicos, espacios verdes., En algunos casos, el
municipio se encargaba también de la producción y distribución de agua
corriente y del saneamiento. La transformación de este actor local se orienta
actualmente hacia una ampliación de sus funciones en el área de las políticas
sociales y de desarrollo económico-productivo. En esta medida, el municipio se está
planteando la necesidad de instalar lógicas horizontales que les permitan crear
ámbitos adecuados a sus nuevas funciones” (2002:121).
Por lo tanto, la participación de la ciudadanía y la
sociedad civil están permitiendo la conformación de estos espacios de dialogo y
de concertación, con la finalidad de orientar el trabajo participativo,
organizado y planificado hacia el logro de metas. Para ello, es importante
tender puentes, generar espacios de comunicación y dialogo, aperturando mesas de trabajo y de concertación
en los diferentes sectores o dimensiones; de esa manera, llegar a acuerdos importantes. Todo ello, se
tiene que construir con la participación de los ciudadanos, representantes de
las diferentes instituciones y organizaciones sociales existentes en el
territorio.
A través de
este proceso, se debe involucrar
a todos los actores sociales, políticos, económicos y culturales, líderes y
autoridades, en torno a una propuesta amplia con la participación y el aporte
de los diversos ciudadanos; de tal manera que en forma conjunta se elabore el
Plan de Desarrollo Concertado, que viene a ser el documento matriz, para la
elaboración de otros planes, como son: educación, salud, seguridad ciudadana,
medio ambiente, agrícola, economía, entre otros; todas estas herramientas deben
ser participativo, informados y validados, mediante la realización de eventos
como foros de diálogos y concertación.
Por lo tanto, para construir un modelo de Desarrollo
Económico Local, debemos partir por conocer el proceso histórico por la que ha
pasado un determinado territorio Distrital, Provincial, Regional o Nacional;
para lo cual, construir ese gran proyecto de desarrollo implica partir por conocer o hacer una hoja
histórica y entender las etapas que ha
pasado este distrito. Como es el caso del Distrito de Casa Grande.
Debemos considerar que hasta la fecha el Distrito de
Casa Grande, desde el punto de vista
económico, ha pasado por tres modelos de Desarrollo. La primera, está
relacionado al modelo de Hacienda o también denominado semifeudal; la segunda
etapa, está vinculado al modelo cooperativo o también denominado capitalismo
dependiente y la tercera etapa está relacionado al modelo empresarial privada,
y la constitución del gobierno local/municipal.
Casa Grande, como distrito recién tiene 15 años de
creación política, en comparación a la formación empresarial y económica; pero
como territorio, cuenta con más de cinco siglos; por lo tanto, podemos decir
que ha pasado por tres etapas bien marcadas, donde cada fase o etapa ha tenido
una propia dinámica social, política, económica y cultural.
Estos modelos económicos, particularmente los dos
primeros, han estado vinculados estrechamente con las políticas sociales,
propiamente dicho; ya que, el predominio económico ha sido la determinante para
la construcción de un modelo de
sociedad. Del mismo modo, la ausencia del Estado y de las políticas
públicas en el espacio local, no era tan imprescindible. Totalmente diferente
al modelo vigente, donde la presencia de un Estado Subnacional, ha permitido
asumir un rol y tener la disponibilidad para poder responder a las necesidades
de la ciudadanía; pero, para llegar a ello, está tratando de luchar y ganarse
el principio de autoridad. Por lo que, a continuación pasamos a describir estas
etapas:
Si hacemos un poco de historia, podemos decir que el
primer modelo de desarrollo económico local que se tuvo en Casa Grande, fue el
de Hacienda con sus características ya mencionado en varias oportunidades;
donde ha ido reconcentrándose la tierra en pocas manos. Por lo que, durante la
década de los 30 del Siglo pasado, los dueños de este emporio azucarero fueron
la familia Gildemeister, provenientes de
Alemania, quienes adquirieron la hacienda y posteriormente fueron
expandiéndose territorial y económicamente
poco a poco, comprando muchas haciendas y terrenos, extendiéndose hasta la
Provincia de Sánchez Carrión, en esta Región de La Libertad. Del mismo modo,
sus principales actividades económicas estuvieron concentradas en la producción
del Azúcar, el ganado vacuno y la producción de panllevar.
Para llevar a cabo la producción agroindustrial del
azúcar, tuvieron que traer mano de obra de la zona andina, particularmente de
la zona de Cajamarca y del ande liberteño; quienes eran traídos a través del sistema
de enganche, donde muchos venían como jornaleros, dedicándose a la siembra y cosecha de la caña
de azúcar en los campos de cultivo; luego, al cumplir su periodo de tiempo, la
caña de azúcar, eran quemados recogido manualmente por los jornaleros, para
luego ser transportados en baúles del
tren al ingenio y allí realizar su procesamiento culminándolo en azúcar. En
esta etapa el trabajo que realizaban las personas era manualmente, ya que no
había mucha maquinaria para realizar dicha labor.
Durante esta primera etapa, Casa Grande, era considerado como un
campamento, donde sus viviendas eran de material noble (adobe con barro), con
uno a dos piezas, donde habitaban los trabajadores; contrariamente a la de los
hacendados que eran viviendas amplias y modernas para su época. Del mismo modo,
el perímetro del campamento era cerrado por una muralla de adobe, solamente
había dos portones de entrada al campamento y al ingenio; de esa manera, las
personas que querían venir a este lugar, tenían que pasar por una puerta
principal quién les atendía y posteriormente podía dirigirse al familiar que
deseaba visitar, esta visita implicaba un determinado tiempo, porque
posteriormente no podía continuar, tenía que retirarse.
Del mismo modo, dentro del campamento existían bazares
y mercados, donde la población acudía a recibir y/o comprar sus necesidades
alimentarias. El bazar era propiedad de los dueños de la Hacienda, por lo tanto
la población acudía a comprar algunas cosas por necesidad, estas adquisiciones eran
descontados al trabajador; en otros casos las personas compraban con su propio
dinero. Es importante resaltar que en Casa Grande existía su propia moneda.
Del mismo modo, dentro del proceso expansivo de su
territorio, los dueños de Casa Grande, lograron tener un fuerte control de la economía y el
poder político no tan solo en esta zona, también lo tuvo en toda la región y a
nivel nacional; donde pudieron construir un emporio de la Hacienda azucarera,
monopolizando el mercado interno.
Conjuntamente con sus trabajadores que eran migrantes
del ande liberteño, comenzaron a construir un modelo de desarrollo basado en el
trabajo, la sumisión, el respeto, honradez y la honestidad. Es decir se vivió
una etapa feudal y semifeudal.
Es importante indicar que durante esta etapa, los
Gildemeisters como dueños de la Hacienda, asumieron el costo de todo lo que en
aquel entonces implicaba políticas sociales como: educación tanto a nivel
inicial y primaria, salud primaria, bienestar, alimentación, etc.; por lo que,
en esta etapa la presencia del Estado y del gobierno local, conjuntamente con
sus políticas públicas y locales, dentro de la hacienda estaban ausentes,
siendo reemplazado por las acciones que hacían los hacendados.
Lo que en la actualidad se le denomina responsabilidad
social, los hacendados los asumían como obligación; ya que, era una
reivindicación gremial y laboral, por parte de los trabajadores y de su
sindicato, que en todo momento recibieron represión por parte de los dueños que
se oponían y estaban en contra de la organización sindical. Pero, los
trabajadores generaron grandes jornadas de lucha para poder obtener sus
beneficios y reivindicaciones económicas, laborales y sociales. Es decir, la
mayoría de las reivindicaciones sociales existente en esta etapa, fue producto
de grande luchas sociales.
El modelo de
desarrollo, de esta primera etapa, se circunscribía en una buena atención y
bienestar para los trabajadores, el respeto de sus 8 horas, que fue una conquista de los trabajadores
producto de grandes jornadas de lucha llegando a conseguirlo gracias al sudor,
sangre y sacrificio de muchos trabajadores; salud, educación, nutrición, etc.
Con respecto a la salud, dentro de la hacienda se
brindaba salud primaria, atención en partos, accidente de los trabajadores
dentro de su jornada, etc.; esto lo hacían dentro de la empresa, ya que existía
un hospital solventado por los dueños de la hacienda. Del mismo modo, era con
la educación, donde los hijos de los trabajadores tenían acceso a una educación
primaria, y la empresa era el responsable de cubrir esos gastos que demandaban
en aquellos tiempos.
Junto a la educación, la hacienda también brindaba
alimentación a sus trabajadores, donde ellos y sus familias recibían dicho
beneficio; entre otros.
Podemos concluir manifestando que el modelo de desarrollo, dentro de esta primera etapa
en Casa Grande, se sustentó en un crecimiento económico no redistribuido entre
los trabajadores; por el contrario, estuvo centrado en la plusvalía y en la
concentración del poder y de la riqueza en el hacendado. A pesar de ello, se
contaba con políticas sociales obtenidas en jornadas de lucha social y
reivindicativa, permitiendo beneficios
en favor de la clase trabajadora, logrando un bienestar para el trabajador como
para su familia.
b. Modelo Cooperativo:
El segundo modelo de desarrollo dentro del territorio
casagrandino, se dio a raíz de la reforma agraria donde se expropio a los
hacendados sus tierras para dárselos a los trabajadores; es importante indicar
que El Estado tuvo que cubrir el pago de la empresa a través de bonos, que
fueron valorizado de acuerdo a los documentos contables y financieros con las
que informaban a las entidades públicas, de aquel entonces.
La Reforma Agraria implementada por el General Juan
Velasco Alvarado, producto de un golpe de Estado, permitió salvar a la gran
mayoría de las haciendas que se encontraban en una situación de crisis
económica y del debacle de una sociedad semifeudal predominantemente capitalista;
además significó un salto cuantitativo y cualitativo dentro de la sociedad
peruana, ya que se dio paso al
fortalecimiento del capitalismo dependiente, basado en un proceso de
industrialización, modernización de la estructura productiva, financiera y
comercial. Por lo que, este nuevo modelo de desarrollo en Casa Grande, se
inicia en el año de 1968 y culmina en el año de 1998.
Este cambio de modelo empresarial, es decir de
hacienda a cooperativa; implico que el control de la empresa pasara a manos
de los trabajadores quienes asumieron
la conducción de la empresa. Por lo que, cumplieron dos funciones: 1) se
convirtieron e propietarios de la empresa; y 2) a la vez seguían siendo
trabajadores de la empresa. En esta etapa desaparece la Plusvalía y la
explotación del hombre por el hombre. Todos los trabajadores y familiares, se
beneficiaron de una serie políticas sociales, retribuciones económicas,
existente en la empresa.
Esta etapa es para generar mucho debate y discusión;
pero se debe resaltar y rescatar la responsabilidad social, que asumió la
empresa cooperativa dentro de los sectores de educación, salud, nutrición; logrando en todo momento el
interés por el bienestar del trabajador y su familia, así como también los
beneficios sociales y laborales que tenían, los llevo a entender la importancia
de la familia y de su superación. Todo ello formaba parte de la filosofía del
cooperativismo.
Es importante indicar, por ejemplo, que los
trabajadores tuvieron la oportunidad de educar a sus hijos, ya que el
cooperativismo asumía la responsabilidad económica e infraestructura en la
educación, particularmente en los niveles básicos (Inicial, Primaria y
Secundaria); del mismo modo, la empresa apoyaba a muchos jóvenes que deseaban
continuar con estudios de nivel técnico
(SENATI); mientras que muchos
trabajadores recibían algún tipo de apoyo por parte de la empresa, para que sus
hijos pudieran seguir estudiando en las universidades públicas. Fueron
decisiones importantes que les permitió a muchos jóvenes de aquel entonces ser
profesionales. Esto era cubierto por los sueldos y salarios que percibían,
además de ser semanal el cobro de sus sueldos.
Durante esta etapa, se acentuó un proceso de
modernización laboral, en el sentido de que la empresa comenzó a adquirir
maquinaria moderna, para de esa manera evitar el arduo trabajo que tenían los
trabajadores en la etapa de hacienda. Por lo tanto, se adquirieron tráiler,
para trasladar la caña del campo al ingenio; grúas, para levantar la caña
quemada y llenarlos en los tráileres. Así como se compraron maquinarias
modernas, en otras dependencias también se comenzó a modernizar el
equipamiento.
Del mismo modo,
los hijos de los trabajadores tanto profesionales como no profesionales,
tuvieron la oportunidad de trabajar en la empresa, teniendo ellos la prioridad.
En lo que respecta a la salud, la misma empresa
cooperativa cubría la atención desde lo básico preventivo y primario hasta los
partos y accidentes; e incluso se daba
tratamiento a todos los pacientes que necesitaban
esas atenciones en las instituciones de salud privada. En otros casos habían
pacientes que eran evacuados y trasladados a centros de salud privados o la
Seguridad Social; todo los gastos era cubierto por la empresa cooperativa que
abarcaba al trabajador y a su familia; del mismo modo, la medicina también la
empresa lo financiaba.
En el aspecto nutricional y alimentaria, la empresa
les asistía con una ración diaria a todos los trabajadores de la empresa, esa
ración consistía en: Leche, arroz, carne, pollo o pescado, huevos, tubérculos,
etc.; en otras ocasiones, los trabajadores del campo recibían sus alimentos en
su trabajo que era proporcionado por la empresa como por sus familiares. Del
mismo modo, para fiestas patrias y navidad recibían gratificaciones consistentes
en una cantidad considerable, que podían ser medio o un sueldo completo.
Por otro lado, los niños de los niveles iniciales y
primarios, recibían sus útiles escolares, uniforme, además de su desayuno todos
los días. Para navidad, los hijos de los trabajadores se beneficiaban con
juguetes para cada uno. Durante los meses de Enero a Marzo, de todos los años,
se realizaban vacaciones útiles para los hijos de los trabajadores; estas
vacaciones útiles estaban relacionado a recreación y deporte, arte, etc. Además
de cursos de afianzamiento para los niños, y de repostería, industria del
vestido a las madres de familia.
Asimismo, las viviendas fueron asignada a cada
trabajador como algo propio; por lo que, muchos comenzaron a ampliar sus viviendas
y a mejorarlos. En la empresa había el área de servicios urbanos los que se
encargaban de brindar mejoramiento a las viviendas cuando estas se encontraban
en mala situación.
Durante esta etapa, hubo una expansión urbana, donde
comenzaron a construirse viviendas para más trabajadores. A la vez, en los
últimos años del cooperativismo, comenzaron a formarse Asentamientos Humanos,
producto de las invasiones que realizaban los hijos o familiares de los
cooperativistas.
Los servicios básicos como: Electrificación, Agua
Potable y Desagüe, eran atendidos por la misma empresa cooperativa; lo cual, la
población no gastaban en el pago de estos servicios, en comparación a otros
lugares que eran cubierto por las mismas familias que habitaban sus viviendas.
La presencia del Estado subnacional en este lugar no
se hacía sentir; en esta etapa, se conformaron instituciones públicas, como:
Policía Nacional, Teniente Gobernación, la Educación de nivel secundario y el
juzgado de paz de primera y segunda nominación.
Es importante indicar que el pago de impuestos y
tasas, como las contribuciones municipales, era cubierto por la empresa; estos
pagos se hacían en la Municipalidad Distrital de Chocope.
A este modelo, también lo podríamos denominar
Desarrollo Local Endógeno, ya que la empresa prefería potenciarse tomando en
cuenta su propio capital humano, como obrero, técnico y profesional que eran
del mismo lugar. Y en algunas ocasiones contrataba personas especialista que
eran de otros lugares; pero, la preferencia lo tenían los propios
casagrandinos.
Durante este modelo de desarrollo cooperativo, las
oportunidades laborales para los hijos de los trabajadores, fue algo importante
ya que la gran mayoría de las familias estaban ocupadas en el trabajo y podían
sostenerse económicamente.
Podemos decir que en este modelo, había una ausencia del Estado y de las políticas
públicas y sociales; pero, no se dejaba notar porque eran cubiertas por la
empresa cooperativa, donde también asumieron su responsabilidad social.
c. Modelo de Sociedad Anónima:
Y el tercer modelo de desarrollo, se inicia con la
creación de la Municipalidad Distrital de Casa Grande, que fue el 15 de Enero
de 1998. Por lo que, hasta la fecha, han pasado 4 Alcaldes por el Distrito de
Casa Grande, donde han venido construyendo una sociedad moderna, dejando de
lado el enfoque comunitario del Distrito.
La creación del Distrito de Casa Grande, fue un hecho
social importante, ya que anteriormente, era un centro poblado menor, a pesar
de la mayor cantidad de habitantes existente y el alto índice de contribuyentes
y pagadores de sus impuestos, conjuntamente con el pago y contribuciones que
hacia la empresa cooperativa a la Municipalidad Distrital de Chocope, al cual
dependía.
Uno de sus grandes precursores para que Casagrande se
convirtiera en Distrito fue Alberto Bailón Bustamante, Administrador, quien
conjuntamente con una comisión que se conformó en asamblea pública, lograron
gestionar ante el gobierno central la separación y su posterior creación como
Distrito. Obteniendo dicho logro en menos de 5 años de ardua gestión.
Paralelo a esta jornada de lucha para convertirse en
Distrito, y bajo el gobierno nacional
dirigido por Alberto Fujimori, se comienza a presionar a las empresas cooperativas a cambiar de modelo empresarial
para pasar a ser de Sociedad Anónima. Este cambio de modelo empresarial,
implico conflictos internos entre trabajadores que se organizaron a favor del
cambio o en contra del cambio de modelo. Posterior este proceso, comenzaron a
llegar personajes del mundo empresarial nacional a querer invertir generándose
conflictos sociales y confrontaciones permanente, por tener el control de la
empresa. Por lo que, en estos últimos
tiempos la Familia Rodríguez Banda,
quienes también son propietarios de la Empresa Lechera Gloria; son los
accionista mayoritario de esta empresa privada.
Este cambio de modelo empresarial, significó que los trabajadores dejaran de ser
dueños de la empresa, para pasar a convertirse en peones y trabajadores de ella;
ya que, en un determinado momento fueron propietarios. Por lo tanto, pasan a
convertirse en trabajadores asalariados.
Durante esta tercera etapa muchos beneficios sociales,
que se mantuvieron dentro de las etapas anteriores, se han ido extinguiendo;
por lo tanto, las familias son las que vienen asumiendo el costo y la
responsabilidad.
Con respecto a las políticas sociales como: Educación
y Salud, estas son atendidas por las instituciones públicas; donde la empresa,
ya no cubre la remuneraciones de los docentes, ni tampoco existe incentivo y/o
apoyo a los hijos de los trabajadores para que sigan estudiando nivel técnico
y/o universitario. Todo es cubierto por la familia.
Asimismo, la empresa no contrata mayormente la mano de
obra de los jóvenes que son de este mismo lugar; prefieren traer o contratar
mano de obra de personas foráneas al distrito. Lo cual, implica una concepción
exógena del desarrollo económico.
De la misma manera, dentro del ámbito de salud, la
empresa ya no asume la atención a los familiares de los trabajadores; estas son
atendidas por el Puesto de Salud del Ministerio respectivo, y/o Essalud; ya
que, a los trabajadores de la empresa se les hace un descuento para que puedan
ser atendidos en esta entidad.
También es importante indicar que los servicios
básicos como la electrificación para las viviendas, ya no es cubierta por la empresa
como lo era en tiempos de hacienda y cooperativa; ahora, cada propietario de su
casa es la que paga este servicio.
En lo que, respecta al caso del agua potable, en algunos sectores de preferencia en los Asentamientos
Humanos, la familia es la que paga los
servicios; mientras que, en otros sectores la empresa es la que se encarga de
brindarles el servicio del agua potable para consumo humano; pero de acuerdo a
los estudios proporcionado por el Ministerio de Salud de la Provincia de
Ascope, indican que el agua que se consume en Casa Grande no es acta para el
consumo humano.
Las viviendas, que pertenecían a la empresa durante
las etapas anteriores, han sido transferido a las familias que han habitado por
mucho tiempo; por lo tanto, estas familias en la actualidad son las que se
encargan de pagar sus contribuciones; es decir todos los servicios municipales,
ahora son cubiertos por los ciudadanos del Distrito; lo cual, era diferente en
las etapas anteriores, donde la empresa
era la encargada de contribuir con esos servicios municipales.
Durante esta etapa, también la expansión urbana se ha
incrementado enormemente; ya que, la presencia de Asentamientos Humanos, que
han sido mayoritariamente invadido por los hijos y familiares de los
trabajadores, actualmente se ha incrementado aceleradamente habiendo un promedio
de 23 Asentamientos Humanos a nivel del Distrito de Casa Grande.
7. Confundiendo el desarrollo local en el Distrito:
En sus inicios de gestión empresarial de propiedad
privada, los actuales dueños y accionistas mayoritarios el grupo Gloria, se
autoconsideraban los únicos conductores del modelo de desarrollo; ellos
implantan una concepción ideológica y filosófica sustentada en el
neoliberalismo; donde, hacen creer que todo lo privado es mejor, por lo tanto,
lo público es malo. Por lo que, comienzan a someter a sus propios intereses a
la gestión municipal anterior; esto se debe a que el Alcalde Anterior al
actual, era un trabajador de la empresa por lo que fue condicionado.
Además, los
empresarios de Gloria, consideran que el
poder económico con que se cuenta como empresa,
está en la capacidad de hacer y deshacer dentro de este espacio
territorial, sin respetar las instituciones públicas como es el gobierno local;
por lo tanto, trataron de ignorar la
presencia del Estado Subnacional. Del mismo modo, buscaron en todo momento
imponerle a la municipalidad distrital
de Casa Grande la hoja de ruta, las condiciones o la agenda pública; es decir
desacatar las ordenanzas y medidas gubernamentales.
Si hacemos un poco de historia dentro de esta tercera
etapa, podemos decir que en la penúltima gestión municipales (del Ing. Vásquez
Cerquin), la empresa ha venido secuestrando al gobierno local, donde hubo un
periodo en que la empresa colocaba a sus representantes en el gobierno
local, para que ellos se encargasen de
dar facilidades, beneficios y exonerar una serie de impuestos, en favor de la empresa privada. Es decir, se
quería demostrar que la empresa privada era la que decidía las políticas
públicas locales; por lo que, algunos alcaldes anteriores a esta gestión
comenzaron a exonerar y a dar carta blanca para que la empresa privada hiciera
de las suyas. De esa manera, han querido demostrar que la empresa privada
todavía cuenta con poder económico y político;
por lo tanto, las instituciones públicas tienen que someterse a las
decisiones de esta.
Pero esta concepción neoliberal, tuvo su fin con el
triunfo y la asunción de una nueva Gestión municipal a nivel distrital; donde
comenzó a defender su principio de autoridad, y demostrar que dentro de un
espacio territorial, quien debe liderar y promover el desarrollo es el gobierno
local; para ello, busco involucrar a la sociedad civil, a las instituciones
públicas y privadas, y a los diversos actores locales. Es decir, comenzó a
fortalecer el principio de autoridad donde todas las instituciones públicas y
privadas, deben adecuarse a las normas y mandatos que disponga esta entidad
subnacional.
En un primer momento, la empresa privada no acepto esta
nueva reforma política dentro de la sociedad; ya que creía que podía actuar
como lo hicieron en los modelos de desarrollo anteriores; pero, se encontró con
un gobierno local, que quiere construir el desarrollo y crecimiento económico
de su territorio; para lo cual, ha tendido puentes con las diversas empresas
privadas(pequeñas, medianas y grandes empresas), existentes en el territorio,
proponiendo un modelo de desarrollo endógeno, donde se tome en cuenta el
capital humano y social del mismo lugar; de esa manera generar crecimiento y desarrollo; trabajar por la reducción de la desnutrición y la
tuberculosis, y se de las oportunidades a las nuevas generaciones de jóvenes.
Es importante entender que un desarrollo local
endógeno, implica aprovechar las potencialidades, fortalezas y oportunidades,
existentes en el mismo lugar; donde todas las ganancias y utilidades,
provenientes de las empresas privadas sean revertidas en este mismo lugar para
de esa manera poder construir desarrollo humano. Eso implica, que la empresa
debe apostar e involucrarse en el desarrollo del distrito, y no paralelizar o
duplicar esfuerzos, por el contrario debe contribuir al desarrollo del
Distrito, dándole sostenibilidad.
Luego de una etapa de dialogo y persuasión, los accionistas
mayoritarios de la empresa agroindustrial han podido entender que dentro de un
espacio territorial donde existe el
Estado Subnacional, esta última es la encargada de promover el desarrollo; por
lo que, en estos últimos tiempos, los funcionarios de la empresa han entendido
que su función no es suplir ni tampoco opacar o desacreditar al gobierno
subnacional; porque dentro de un territorio el Estado subnacional representado
por la municipalidad es la encargada de
liderar el desarrollo territorial, incorporando a los diversos actores locales,
en la planificación e implementación de políticas de desarrollo, donde se los involucren asumiendo compromisos para obtener
metas vinculados a la calidad de vida y al crecimiento económico.
A
lo largo de este ensayo, podemos darnos cuenta que existen muchos cambios
importantes que se han dado; esto lo podemos describir de la siguiente manera:
En las dos etapas por la que ha venido atravesando el
Distrito, hemos encontrado que el espacio territorial estaba constituido por
una comunidad; esto se debe a que las relaciones parentales y familiaridad era
la más predominante. Del mismo modo, la procedencia de las personas que se
instalaron en este lugar, les daba mucha cercanía y familiaridad. Tal como lo
describe Arocena, quien indica que: “La
comunidad no es, por lo tanto, un hecho social que expresa una forma primitiva
de relación. Es más bien un sistema de relaciones complejo que genera
asociaciones entre individuos en función de
determinados valores. Pero, como en todo proceso de socialización, se
trata de la creación de vínculos siempre asociados a relaciones de poder y, por
consiguiente, a situaciones conflictivas. En esta forma de concebir la
comunidad estamos lejos de la pureza nostálgica o del paraíso perdido; nos
ubicamos en un proceso complejo basado en solidaridades que es necesario
explicar.” (2002:62-63).
Por lo que, pasando al último modelo de Desarrollo
Económico Local, encontramos que también se ha dado un gran salto cuantitativo,
en el sentido que: 1) debe entenderse como Sociedad; 2) la expansión urbana, 3)
el incremento de la población; 4) la presencia de personas provenientes de
diversos lugares fuera de ella, han permitido traer sus patrones culturales; 5)
la incorporación de otras actividades económicas, como es el comercio
ambulatoria, la presencia de entidades financieras, farmacias, tiendas
comerciales, el transporte público y privado, etc.; todo ello, le ha permitido dar
otro matiz al territorio. “Las sociedades
locales existen en territorios cargados de huellas del pasado. El espacio no es
neutro, el expresa la historia de los hombres, sus conflictos y sus sistemas de
vida, sus trabajos y sus creencias. La memoria colectiva otorga un sentido la relación entre pasado, presento y
proyecto, expresando así los contenidos profundos de la identidad colectiva. La
vuelta al pasado por la memoria, la lectura de las huellas que permiten
reconocerse en una historia, es una condición de la acción…, no se trata de reconocer
huellas, sino de reconocerse en esas huellas.” (Arocena, 2002: 219)
Existe una gran diferencia entre Comunidad y Sociedad,
por lo tanto podemos decir que “En las
sociedades se expresan relaciones basadas en el egoísmo individual, en el
cálculo, en el lucro, en el individuo desintegrado. En cambio, las comunidades
son el resultado de procesos de integración. La comunidad es una estructura que
existió antes de que la civilización del dinero y del lucro pervirtiera todo,
antes de que el dominio de las maquinarias deshumanizara la convivencia”
(Arocena, 2002:62)
Debemos resaltar que en el sistema cooperativo y en el
actual, se desarrollaron dos comportamientos. Un primer comportamiento estuvo
relacionado al igualitarismo, donde la distribución de las riquezas, en este
caso las utilidades, se daban en forma equitativa para todos, del mismo modo
era con la alimentación, útiles escolares, la educación también era igual,
salvo alguna excepciones. “El
igualitarismo, por su parte se preocupa por la distribución igualitaria de los
beneficios. El problema, como dice Van Parijs, es que el tamaño de la Torta
depende también de la manera como es distribuida. De ahí que las corrientes
igualitaristas hayan debido buscar criterios para conciliar igualdad y
eficiencia. Es por ello que se ha hablado de equidad, dándole a este término
una significación que pone en relación la distribución con la contribución de
cada uno de la producción de riqueza” (Arocena, 2009:149).
Mientras que en el caso actual, donde viene
predominando una sociedad, política y económicamente liberal; ya que, para
ellos el mercado es el único encargado de solucionar el/los problema (s)
existentes dentro de un espacio territorial. Por lo tanto, el ser humano tiene
que adecuarse a esta realidad y a este proceso.
Todo territorio cuenta
con una historia, y al tenerlo ya estamos hablando de una identidad, que en
algunos de los casos se vincula con el pasado que fue mejor, a ello se le
denomina identidad nostálgica tal como lo define Arocena, cuando dice que: “Es frecuente que las sociedades locales
hayan conocido tiempos existido realmente; en otros, el pasado aparece mejorado
por procesos de memoria selectiva. Lo que se observa como un fenómeno bastante
generalizado es la tendencia a recordar el pasado con un aire nostálgico, añorando
una forma de convivencia social y de desarrollo económico aparentemente muy
superior a las formas presentes.
Varios de los casos estudiados se sitúan en esta forma
nostálgica de la identidad colectiva… En todos los casos se percibe una
relación entre un pasado aparentemente mejor y un futuro incierto, pasando por
un presente sin grandes realizaciones.
Ese mirar hacia otras impide, por otra parte, toda
proyección hacia adelante . En el nivel de las representaciones colectivas, el
futuro se dibuja como una vuelta al pasado. Es necesario resucitar tal o cual
empresa, recuperar una dinámica comercial, volver a ser un pequeño centro
financiero. No es posible imaginar alternativas porque el campo de las
representaciones mentales está totalmente invadido por lo que se tuvo y se
perdió.
Desde el punto de vista del estímulo de los procesos
de desarrollo local, esta situación es una permanente fuente de generación de
barreras y obstáculos. Trabajar en este nivel de las representaciones es una
prioridad absoluta en estos casos. No habrá iniciativas con impacto colectivo
mientras no se puedan superar esas tendencias nostálgicas.” (Arocena,
2002:221-222)
La identidad Casagrandina tiene que reafirmarse, para de
esa manera evitar que los cambios de modelos de desarrollo, social y político,
lo extingan. “La afirmación de la
identidad local se basa en ese reconocerse en una historia colectiva.
Todos los componentes de esa identidad se explican solamente si se percibe la
existencia de una historia viviente en cada uno de los habitantes de la sociedad
local. Ahora bien, este reconocerse en la historia no tiene sentido si espera
quedarse en una mirada nostálgica del pasado. Solo adquiere toda su
potencialidad cuando la fuerza de esa carga histórica provoca interrogantes
sobre el presente y sobre el proyecto. La identidad se convierte en palanca del
desarrollo cuando lleva a descubrir la posibilidad de actuar. Pero este
descubrimiento solo es real, solo genera realizaciones cuando el individuo o el
grupo que actúa se reconocen a sí mismo como capaces de aportar a su comunidad”
(Arocena, 2002: 220)
-
Casa Grande ha
pasado por tres modelos de desarrollo económico local, donde ha venido
predominando la gran industria Agroindustrial Azucarero que es la más
importante del País. Por lo tanto, la principal actividad económica en este
territorio sigue siendo el cultivo de la caña de azúcar, asimismo se han
incorporado otros tipos de actividades como: la finanzas, los servicios, el
comercio ambulatorio, la metalmecánica, las pymes, entre otros.
-
Dentro de este
proceso de modelos de desarrollo también han ido predominando el tipo de
territorio (Comunidad y Sociedad). Por lo tanto, Casa Grande, en la actualidad,
ha dejado de ser una comunidad para pasar a ser una sociedad. Es decir se ha
ingresado a una etapa de modernización, pero con un pensamiento y una ideología
tradicional.
- En lo que respecta, al tipo de régimen laboral y de asociatividad, se ha pasado de una etapa sustentado en el Igualitarismo al de un Liberalismo a ultranza. Donde la población, mayoritariamente, ya no depende laboralmente de la empresa agroindustrial, generando un alto índice de desocupación, desempleo y subempleo, permitiendo el incremento de la inseguridad ciudadana.
- Lo económico ha permitido desarrollar el modelo de vida y de sociedad, donde lo endógeno ha predominado en las dos primeras etapas; mientras que el desarrollo exógeno se ha venido a posicionar en esta última etapa. Por lo tanto, el capital humano del mismo lugar está siendo desplazado por una mano de obra foránea.
- La identidad dentro del distrito, como expresión de vínculo entre el sentimiento y el desarrollo, esta encontrado en la medida de que no se va cultivando debido a múltiples factores, que está permitiendo su proceso de extinción. Solamente, se asume la identidad dentro de un aspecto nostálgico, como que lo pasado fue mejor que en la actualidad.
10. Bibliografía:
- Arocena, José “El
Desarrollo Local: un desafío contemporáneo”, Universidad Católica del Uruguay,
Taurus. 1era Edición, Marzo del 2002, Uruguay.- INSTITUCION DEMUCA “Guía de Herramientas Municipales para la promoción del Desarrollo Económico Local”. Fundación DEMUCA 2009, Centroamerica, el Caribe.
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